Ya conoces la aventura, ahora ... ¡atrévete a vivirla!

Comenzaremos por el principio. Mario Megías es un extremeño del Sur de Extremadura muy peculiar. Por sus venas corre pura aventura mezclada con los glóbulos rojos. Hace unos años se proclamó Campeón de España de Trial Extremo 4x4, una categoría que se encargó de fomentar y en la que en 2006 no tuvo rival que le aventajase. En la actualidad y como buen extremeño, es emprendedor y regenta la "Casa Rural El Águila" en Montemolín además de la empresa XtremaBuggy con la que realiza rutas en buggys por el lugar que el cliente reclame. Lo mismo te lleva a dar una vuelta a Santa María de Nava y te muestra los alrededores de Montemolín, que se tira una semana o diez días recorriendo el Atlas Marroquí en un viaje organizado a medida. No hay límite, solo las ganas de divertirse y conocer en primera persona este deporte.

 

Mario nos ha propuesto hoy acompañarle a una ruta que ha organizado con unos clientes. Iremos con tres buggys que pilotará cada uno de los participantes y nosotros nos reservaremos el copilotaje del primero para poder fotogrtafiar la experiencia. Iremos con Alan, que ha venido desde Panamá a pasar unos días en Extremadura y con Ricardo que después de una larga temporada fuera de la región ha vuelto para disfrutarla.

 

Los vehículos son altamente fiables. Toda seguridad es poca. Usaremos guantes, pañuelo protector para nariz y boca y gafas protectoras. Tienen barras antivuelco y cinturón de seguridad para prevenir cualquier problema que pueda surgir. Realmente, como nos cuenta Mario, la dificultad la marca cada cliente en cada una de las excursiones. Si vienen personas que han pilotado ya en otras ocasiones este tipo de vehículos y quieren más aventura, se incluye un trazado más "trialero". Hay incluso familias que vienen a vivir la experiencia y para ello XtremaBuggy cuenta con vehículos familiares de cuatro plazas.

 

Salimos de Montemolín, buscando el cauce seco del Río Viar, afluente del Guadalquivir que discurre por tierras pacenses.

 

Los pilotos de hoy tienen cierta experiencia, por lo que se han incluido en la ruta algunos recorridos con algo de dificultad de tipo trialero.

 

Tras cruzar cada cerca es imprescindible reagruparse para continuar la ruta sin pérdidas.

 

La falta de lluvias ha ocasionado una aridez que nos hacen pensar que estamos ante un paisaje lunar o marciano.

 
Vamos aproximándonos a Monesterio, primera población que cruzaremos.

 

Tras pasar Monesterio el paisaje cambia por completo.

 

El recorrido ahora discurre entre cercados de piedra, encinas y alcornoques.

 

Llegamos a Calera de Leon, donde haremos una parada a la altura de su espectacular Conventual.

 

Tras visitar el imponente Conventual de Calera de León, Mario vuelve a tripular su vehículo y partimos en dirección a Cabeza la Vaca donde tenemos previsto el almuerzo.

 

Vemos desaparecer a nuestras espaldas Calera de León, encajada entre las dehesas.

 
Alan disfruta con la conducción de su buggy. 

 

Y Ricardo también. La experiencia está resultando extraordinaria.

 

Parada en Cabeza la Vaca para almorzar en Casa Vicente que va a conseguir añadir un plus a la experiencia con su rica cocina.

 
La comodidad, estabilidad y fiabilidad de los vehículos es verdaderamente sorprendente. Aún así, en ocasiones, perdemos el enfoque.

 
Recorremos ahora la falda de la serranía de Tentudía, atravesando nuevos encinares ...

 
... y también robledales y castañares. 

 

Nos dejamos caer ahora en dirección a la provincia de Sevilla. Próxima población: Arroyomolinos.

 

La diversión está siempre asegurada, Alan da fe de ello.

  

Toca reagruparnos de nuevo antes de iniciar el recorrido hacia Tentudía.

 

Continuamos atravesando dehesas y los vehículos hacen gala de su autonomía.

 

Comenzamos con leves ascensos en dirección a Tentudía.

 

Ricardo debe protegerse bien del polvo al ser el último de la expedición.

 

Atravesamos ahora un denso pinar según ascendemos hacia Tentudía.

 

Y algunos de sus habitantes nos sorprenden creyendo no ser vistos.

 

La subida es realmente sensacional. Empezamos a dejar atrás el bosque de pinos.

 

Y por fín llegamos al alto de Tentudía, donde un grupo de turistas escucha explicaciones sobre el edificio.

 

El Monastero es realmente una Iglesia-Fortaleza y se encuentra en un lugar donde ocurrió uno de los episodios más épicos de la Reconquista. 

 

Nos encontramos a 1.104 metros de Altitud. La cota más alta de la provincia de Badajoz. Desde aquí podemos divisar sin problemas territorio de las provincias de Huelva, Sevilla y Badajoz.

 

Ricardo se había retrasado tomando unas fotografías y por fin aparece.

 

Revisamos de nuevo los vehículos y tras comprobar que todo se encuentra a punto reanudamos la marcha.

 

Saldremos en dirección hacia Calera de Leon de nuevo.

 

Cruzamos otra vez cercas que siempre dejamos cerradas tal y como nos las encontramos. El respeto al medio y a las condiciones de cada propiedad son fundamentales.

 

Enfrentamos una de las últimas zonas trialeras de la ruta.

 

La tarde va avanzando y el recorrido cobra en belleza con nuevos colores.

 
Nos hemos encontrado por fin con un pequeño charco, el único en toda la ruta como consecuencia de la escasez de lluvias pero suficiente para proporcionarnos un plus de diversión.

 

Pasamos cerca de Fuente de Cantos y continuamos camino. Preferiblemente siempre caminos de tierra en lugar de carretera, aunque a veces es inevitable tener que tomar algún tramo asfaltado.

 

Alan se ha retrasado para tomar alguna fotografía que enviar a su familia. Le esperamos para llegar juntos a Montemolín.

  

Última parada en la última cerca antes de finalizar y ...

 

... también última reagrupación. Ha sido una jornada verdaderamente increíble. Si tuviéramos que calificar esta experiencia lo haríamos como una experiencia de sensaciones. Durante todo el día hemos sentido emoción, vértigo, alegría. Hemos disfrutado de los olores de la dehesa y los pinares de Tentudía y también de sus colores. Casa Vicente en Cabeza la Vaca nos ha deleitado con creaciones propias que nos han proporcionado nuevos goces ... ¿Qué más pedir? Estamos ante una experiencia total de lo que se puede llamar TURISMO DE SENSACIONES. Si te animas, es muy sencillo. Contacta con XtremaBuggy a través de su web www.xtremabuggy.com, conoce más sobre la empresa y las posibilidades que te ofrecen y atrévete a disfrutar de cualquiera de ellas o proponle a Mario una a medida. Es un regalo para tus sentidos y también para tu pareja o familia muy especial que no vais a olvidar nunca. Además ... engancha. Ya estamos deseando repetir.