Arco de Cáparra · En el regazo de los dioses

Lo recogió Alexandre de Laborde en un precioso grabado publicado en el segundo tomo de su “Viaje pintoresco e histórico de España” en 1811. Entonces estaba rodeado de encinas y chaparros, perdido entre la espesura de la dehesa cacereña. Así permaneció durante siglos, gritando en silencio lo que aquéllas tierras ocultaban en sus entrañas al mismo tiempo que protegía los restos del Municipio Flavium Caparensi.

Arco monumental (Tetrapylon), el único completo en pie de época romana hoy en día. Dividió la ciudad en los cuatro cuadrantes clásicos, uno a cada lado del Decumano Máximo y otros dos originados por el el Kardo Máximo, las dos calles principales. Al mismo tiempo era puerta de entrada en el Foro de la ciudad. Posiblemente policromado y decorado tal y como atestiguan restos de pintura en los paramentos originales, aunque hoy en día está despojado prácticamente de su aspecto original faltándole las estatuas que debieron jalonarlo.

Lo que queda alrededor va aflorando campaña tras campaña y nos ofrece actualmente la visión de algunas domus, un conjunto termal verdaderamente interesante y el Foro con su área sacra en la que se conserva la cimentación de tres pequeños templos, el Anfiteatro, una de las puertas de acceso con su cuerpo de guardia, algunas tumbas ...

Pasear un día soleado desafiando la hora del cierre constituye un placer extraordinario. La quietud, el olor a campo, el cielo con sus nubes juguetonas y … en nuestros auriculares algo especial … In the lap of the gods, de The Alan Parsons Project, porque verdaderamente el Arco de Cáparra duerme en el regazo de los dioses.

Cómo llegar: Cáparra en Google Maps