11 September 2018
Quizás Carlos I de España y V de Alemania soñase con un lugar así. ¿Y si lo hubiese imaginado y después mandado buscar?. Algo así debió pasar cuando el Marqués de Mirabel recomendó al emperador del Sacro Imperio Romano Germánico estas tierras para que se alejase del mundanal ruido tras su abdicación.
La elección de este lugar para la edificación del Real Monasterio no es caprichosa. Es un paraje rico en agua, con una gran arboleda y una tranquilidad como en pocos lugares puede respirarse. Los bosques aquí son infinitos y de gran belleza. Adentrarse en ellos en una caminata una tarde de otoño es una experiencia inolvidable.
Su construcción empieza en los primeros años del s. XV y aunque inicialmente es un edificio muy modesto, con posterioridad es ocupado por los monjes de la Orden de San Jerónimo y reformado para acoger a Carlos V en su retiro monástico.
El gran estanque y los jardines son diseñados por el enigmático Juanelo Turriano, hombre brillante, relojero real que dejó su impronta en algunas importantes obras de ingeniería relacionadas con la hidráulica.
Manda el emperador lo siguiente en una carta dirigida al arquitecto Fr. Juan de Ortega: "Deseo retirarme entre vosotros á acabar la vida, y por eso querría que me labrásedes unos aposentos en San Gerónimo de Yuste, y para lo que fuere menester acudiréis al secretario Juan Vázquez de Molina, que él proveerá de dineros, para lo cual os envío el modelo de la obra"
Después de viajar desde Bruselas hasta España en barco, inició la comitiva real un viaje hasta tierras extremeñas atravesando tierras castellanoleonesas y llegando al puerto de Tornavacas. El emperador, cansado, según los cronistas de la época, dijo que ya no franquearía ningún otro puerto que no fuese el de la muerte. Aún le quedaba atravesar la Sierra de Tormentos, lo cual hizo especialmente agotador el viaje para un rey cansado.
El día 21 de Septiembre de 1558, dos años después de haber llegado, el monarca moría. Aunque inicialmente fue enterrado en la iglesia del Monasterio, su hijo Felipe II ordenó el traslado de sus restos al Escorial.
Visita que recomendamos desde MiExtremadura encarecidamente. El lugar alberga más sorpresas que trataremos en otros reportajes, como el Cementerio Alemán, la población de Cuacos de Yuste donde puede encontrarse alojamiento y una rica cocina local e incluso también, aprovechar para visitar Garganta la Olla. Es una visita que no entraña dificultad alguna y que podréis realizar con vuestra pareja, amigos o en familia. Feliz visita.